viernes, 31 de agosto de 2018

Renacer de un Códice


Después de un mes de vacaciones regreso de nuevo al trabajo con nuevos y valiosos artículos y decidí regresar hoy ya que hoy porque paso algo increíblemente bueno para todos nosotros los fanáticos del arte y apreciamos lo valioso que es la historia para nuestras vidas y se trata de un acontecimiento muy peculiar y muy simpático ya que el día de hoy despertamos con la noticia que investigadores y especialistas mexicanos confirmaron y dieron a conocer un códice maya de hace 1.000 años.



Dicho trabajo fue un valioso trabajo en conjunto ya que fue una tarea  de recuperación y puesta en valor de dicho documento ya que todo comenzó con la colaboración del coleccionista mexicano Josué Sáenz que compró la pieza en 1964 y exhibió por primera vez en el Grolier Club de la ciudad de New York en los Estados Unidos en 1971.


Y posteriormente devolvió la pieza a su tierra y las autoridades competentes en México en el año de 1974 y a la fecha la pieza genero muchísimas dudas ya que la pieza haya sido robada y tuviera un diseño sumamente simple genero muchas posibles dudas sobre su posible autenticidad, pero como dice el comunicado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México, "Su estilo difiere de otros códices mayas conocidos y probados auténticos"  pero después de muchas investigaciones hasta él día de hoy que determinaron que se trataba de un sobreviviente Códice con 10 páginas hechas de corteza de árbol, y que originariamente pudo haber tenido 20 paginas, pero se perdieron durante los siglos que permaneció en una cueva en el estado de Chiapas al sur del país y que desde hoy decidió renombrarse con él nombre de Códice Maya de México ya que antes se le denominaba el Códice Grolier, también se dio a conocer que dicho Códice es uno de los Códices que sobrevivieron a los intentos de destrucción de manos de los dominadores españoles del siglo XVI.


Y confirmaron que el documento data de 1.000 años de antigüedad ya que fue elaborado entre 1021 y 1154 y para deleite de todos se trata del texto prehispánico más antiguo que se tenga conocimiento y es de estilo calendario y que fue creado en una era de relativa pobreza en comparación con otros Códices ya que se hicieron investigaciones de las tintas prehispánicas que se utilizaron en su elaboración señalo el INAH.


Gran y valioso aporte para la cultura y historia Americana.